Los pacientes confirmados en Francia evolucionan bien y el gobierno afirma que el brote está controlado
Los tres pacientes contaminados por el coronavirus en Francia «van bien” y todos tienen en común haber pasado por la ciudad de Wuhan, el centro de la epidemia en China.
Los médicos del Hospital Bichat de Paris explicaron este sábado que los últimos enfermos “son una pareja de origen chino de Wuhan, que no presentaban ningún síntoma cuando llegaron a territorio francés”.
El hombre tiene 31 años y la mujer 30 años. Sus primeros síntomas de fiebre fluctuante y tos aparecieron el 18 de enero para uno y el 23 de enero para el otro.
“Los pacientes van bien. Uno tiene todavía un poco de fiebre. El otro ya no. Los equipos médicos están bien”, aseguró el doctor Yazdan Yasdanpanah, jefe del servicio de enfermedades infecciosas y tropicales del hospital Bichat, en Paris.
En un encuentro con la prensa, el doctor Jean Christophe Liucet, jefe del servicio de higiene e infecciones hospitalarias del Bichat, explicó que la pareja se encuentra en habitaciones separadas, en depresión (son habitaciones donde el aire entra pero no sale para evitar la propagación del virus) y tienen máscaras de protección respiratoria”.
“La pareja china no presenta síntomas graves que necesiten reanimación”, dijo el médico. Pero los especialistas no saben cuánto tiempo los pacientes deberán permanecer confinados y están en contacto permanente con la Organización Mundial de la Salud.
Para el doctor Yasdanpanah, “esta enfermedad es menos grave que el SRAS”, el otro virus que llegó de China en 2003. ”No hay ninguna inquietud porque el riesgo de propagación de la epidemia en Francia es muy débil”, afirmó.
Estaba presente Pierre Carli, el jefe del servicio SAMU (de urgencias) de Paris. ”El cuidado en los primeros momentos muestra que el dispositivo que ha sido puesto en marcha es funcional. Después de meses, los establecimientos hospitalarios de referencia se preparan para este tipo de circunstancia. Todo el SAMU en Francia se prepara después de días. El conjunto de nuestro sistema de salud está movilizado en forma continua”, precisó.
En los próximas días y ante casos sospechosos, los médicos franceses han decidido otro mecanismo: la hospitalización domiciliaria. Ante un cuadro sospechoso, el enfermo se queda en su casa y el SAMU va hacia él para atenderlo para evitar la propagación.
Medidas de prevención
Un hombre francés de 48, pero de origen chino, está internado en el hospital Pellegrin de Bordeaux con el virus. Trabaja en la industria del vino y había viajado a China por razones profesionales. Hizo una escala en Wuhan, donde está el centro de la epidemia.
Regresó el 22 de febrero y fue a un centro de consulta de SOS Médecins en Bordeaux ante los síntomas de fiebre y tos que sentía. Desde allí fue evacuado por el SAMU al servicio de enfermedades infecciosas del hospital Pellegrin. Los test realizados demostraron que tiene el virus.
“El va bien”, confirmó la ministra de salud Agnés Byin. El hombre vive en Bordeaux y está en un cuarto hospitalario aislado desde el jueves. Las autoridades están tomando contacto con la docena de personas que el cruzó desde su llegada a Francia. Se calcula que son entre 10 y 15 personas que ya han sido señaladas a las autoridades, según el alcalde de Bordeaux Nicolas Floria. Este grupo de gente deberá tomar su temperatura varias veces por día, contactar al 15 si tienen síntomas y permanecer en sus casas.
Este hombre había tomado un vuelo Paris-Bordeaux a su regreso de China. Air France debe hacer conocer como se pone en comunicación con los pasajeros de ese vuelo, que compartieron con el enfermo. También hizo una escala en los Países Bajos.
El alcalde de Bordeaux, Nicolas Florian insistió en que “no hay que ceder al pánico pero hay que ser vigilante. No hay otras casos sospechosos en Bordeaux y las personas que han estado en contacto con el enfermo ya han sido todas contactadas”, aseguró.
La ministra de salud, Agnès Buzyn dijo “que es probable que haya otros casos en Europa. Lo más importante es detectarlos lo más rápido posible. Una célula de crisis ha sido activada en los Hospitales de Paris para una investigación epidemiológica profunda de este caso, que sea inmediatamente puesta en marcha por la agencia regional de salud Ile de France y Salud Pública” anunció la ministra, que es médica y tiene amplia experiencia hospitalaria.
Patrick Pelloux, presidente de la asociación de Urgentistas de Francia y uno de los que se salvó en la masacre del semanario Charlie Hebdo porque llegó tarde a la reunión, considera que “la epidemia llegada de China está bajo control y no hay razón para inquietarse”.
“No sirve de nada tener miedo”, dijo el doctor Pelloux. ”Tenemos gente que nos llama porque ha cruzado a alguien de origen asiático en la calle , que se estaba sonando la nariz. Hay que frenar la histeria colectiva”, pidió Pelloux.
El experto llamó a tomar las cosas proporcionadamente. “Este año va a haber muchas miles de personas que van a morir de la gripe y eso no se convierte en noticia de tapa de los diarios”, insistió Pelloux. “En Francia tenemos tres casos y no son graves. Es una epidemia que está controlada y hay que tener confianza en las autoridades y a la Organziación Mundial de la Salud”, pidió.
Todos exigen no acercarse a las urgencias hospitalarias para evitar los contagios masivos, llamar al 15, que es el servicio del SAMU, y al médico generalista que cada francés tiene en su servicio de salud. Pero sobre todo, no tener miedo, informó Clarín.