Tag

colapso

Browsing

El agresivo avance de una segunda ola de coronavirus en la India llevó al país a romper otro récord mundial en cantidad de casos y muertos diarios. El gobierno lucha por suministrar oxígeno y otros insumos a los hospitales, abrumados por cientos de miles de casos nuevos y casi un millón de infecciones en tres días.

Con 346.786 casos y 2.634 muertes en las últimas 24 horas, más del doble de contagios y de fallecidos reportados en el pico de la primera ola, la segunda nación más poblada del mundo vive un momento crítico con el aumento de las hospitalizaciones y las limitadas existencias de suministros.

La India acumula un total de 16,6 millones de infecciones -está en segundo lugar en el mundo, sólo detrás de Estados Unidos- y 189.544 muertes. Pero en la actualidad es la nación más golpeada del planeta por la pandemia.

Solo la capital, Nueva Delhi, confirmó en la última jornada 24.331 nuevos casos, los que supone aún más presiones sobre sus centros de salud que han estado por días al borde del colapso, por las fallas en el suministro de oxígeno del que dependen cientos de pacientes conectados a respiradores, o que requieren oxígeno suplementario.

«Tsunami de casos»

Este sábado las autoridades del hospital Jaipur Golden, en la capital nacional, informaron de la muerte de 20 pacientes de covid-19 debido a la falta de suministro de oxígeno. Y es sólo un ejemplo de lo que ocurre en gran parte de los centros de salud.

«Ayuda urgente. Tenemos menos de 2 horas de suministro de oxígeno en Moolchand Hospital. Estamos desesperados, hemos intentado con todos los números de teléfono de los centros oficiales, pero no hemos podido conectarnos. Tenemos más de 135 pacientes con COVID y muchos en soporte vital», publicó por la mañana el hospital Moolchand Healthcare, en redes sociales.

De acuerdo al Moolchand, una cadena de hospitales privados en la India, «el tsunami de casos en Delhi causó estragos en el sistema de salud que se estaba recuperando de la primera ola de COVID-19».

Pronóstico preocupante

Muchos expertos predicen que la ola actual no alcanzará su punto máximo durante al menos otras tres semanas y creen que el número real de muertes y casos es mucho mayor que el informado.

El registro diario de contagios en el mundo superó este sábado los 893.000 casos de Covid, principalmente debido al aumento de las cifras en India, informó el diario The Times o India online.

El sistema sanitario de la Ciudad de Buenos Aires se encuentra «cerca del colapso», con una ocupación plena de camas de terapia intensiva en el sector privado y del 80% en los hospitales públicos, lo que llevó a las autoridades a suspender las operaciones que no son urgentes y encendió luces de alarma por la «falta de recursos humanos» para atender a los pacientes afectados por la segunda ola del coronavirus.

Así lo advirtieron a Télam distintas fuentes del sistema sanitario porteño, tanto de las clínicas y sanatorios privados como de la red de hospitales públicos, en donde se comenzó a disponer de otros espacios dentro de las instituciones para sumar camas de cuidados intensivos, como parte de una reorganización de urgencia ante el pico de la pandemia en el distrito, que esta semana llegó a 3.560 casos diarios.

En ese marco, coincidieron en la necesidad de «aplanar la curva de contagios» de Covid-19 en los próximos días, mientras aguardan el impacto positivo de las restricciones a la circulación establecidas por el Gobierno nacional en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), en tanto que algunos de los consultados reclamaron por una profundización de las medidas para contener la suba de casos.

Desde la Asociación de Médicos de la Actividad Privada (AMAP) informaron a Télam que la ocupación de camas en las 66 clínicas y sanatorios privados de la Ciudad oscila entre el 95% y el 100%, por tercera semana consecutiva, y alertaron sobre la apertura de nuevos espacios dentro de las clínicas y sanatorios «para abrir camas críticas atendidas por médicos residentes que no están capacitados».

«Si no se aplana la curva pronto, va a convivir esta situación de saturación de pacientes Covid con las patologías características de invierno y no se va a dar abasto», remarcó el prosecretario gremial de la entidad, Fernando Araneo.

El presidente de la Fundación Sanatorio Güemes, Mario Lugones, aseguró que el sistema sanitario está «cerca del colapso» y si bien sostuvo que tanto en la Ciudad como en la provincia de Buenos Aires se agregaron camas para la atención de pacientes, indicó que eso tiene un límite porque «no hay suficientes terapistas y falta el recurso humano».

«Hoy tenemos terapias intensivas manejadas por cirujanos», detalló e insistió con que lo fundamental ahora es «bajar la curva de contagios»; en tanto que sostuvo que «estamos en guerra contra un virus», por lo que llamó a «mantener el distanciamiento social, ponerse tapabocas, lavarse las manos, seguir vacunándonos y necesitamos que la gente deje de circular».

En la red pública de hospitales, en tanto, la ocupación de camas de terapia intensiva en el sector público alcanzó este sábado el 79,7%, de acuerdo al reporte del Ministerio de Salud porteño, que precisó que de las 450 camas disponibles para pacientes graves, unas 359 están ocupadas, por lo cual quedan disponibles en la Ciudad 91 lugares.

El Ministerio de Salud informó 314.835 nuevos casos, un balance diario que ningún país había registrado hasta ahora, en medio de una segunda ola atribuida sobre todo a una «doble mutación» del virus detectada en la nación asiática.

India registró casi 315.000 nuevos casos de coronavirus en 24 horas, un récord no solo para el país sino a nivel mundial, que pone a los hospitales de Nueva Delhi al límite de sus capacidades con una preocupante escasez de oxígeno medicinal.

El Ministerio de Salud informó 314.835 nuevos casos, un balance diario que ningún país había registrado hasta ahora, en medio de una segunda ola atribuida sobre todo a una «doble mutación» del virus detectada en la nación asiática.

Esto eleva a 15,9 millones el número de personas contagiadas en India desde el inicio de la pandemia, lo que le convierte en el segundo país más afectado por el coronavirus, detrás de Estados Unidos y por delante de Brasil.

Sin embargo, Brasil, con sus 212 millones de habitantes, registró unos 381.000 fallecidos, el doble de India, donde viven 1.300 millones de personas.

Varios hospitales y clínicas de Nueva Delhi lanzaron un llamado desesperado al Gobierno central para que proporcione urgentemente suministros de oxígeno para cientos de pacientes que reciben ventilación pulmonar asistida, informó la agencia de noticias AFP.

El miércoles, la capital recibió 500 toneladas de oxígeno medicinal, una cantidad muy inferior a las 700 toneladas diarias que se necesitan actualmente.

El Gobierno de la urbe de 25 millones de habitantes acusó a los Estados vecinos gobernados por el BJP, el partido del primer ministro Narendra Modi, de retrasar el abastecimiento.

Mandatarios de más de una decena de estados brasileros solicitaron a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) «ayuda humanitaria» contra el Covid-19, advirtiendo la falta de medidas efectivas que contrarresten el crecimmiento exponencial de casos positivos y fallecidos en el vecino país.

El pedido fue realizado en un foro entre gobernadores de once estados de Brasil y la subsecretaria General de la ONU, Amina Mohamed. Asimismo, los dirigentes remitieron una carta al secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, donde redoblaron las críticas hacia la administración de Jair Bolsonaro en el contexto de la pandemia.

“Hay 11 estados en los que a los pacientes hospitalizados les faltan analgésicos, sedantes y en algunos, incluso, oxígeno. En otras palabras, es necesario que la ONU brinde esta ayuda humanitaria ofreciendo tratamientos para los enfermos de Covid-19”, expresó, entre otros, el gobernador de Piauí, Wellington Dias.

Las cuarentenas que duraron más de un mes en Brasil provocaron una reducción de la ocupación -colapsada- de las terapias intensivas tanto en la red pública como privada, por lo que el propio laboratorio federal Fiocruz, que depende del Ministerio de Salud nacional, recomendó este jueves mantener el confinamiento en el país que es el eje de la pandemia, con un promedio superior a 3.000 muertos diarios.

La situación en Brasil es dramática con 17 capitales de estados con una ocupación hospitalaria superior al 90%, según datos oficiales, y especialistas ya advierten que este puede ser el peor mes de la pandemia hasta ahora.

La organización internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) calificó hoy la situación como «una catástrofe humanitaria» y responsabilizó al Gobierno de Jair Bolsonaro por no haber implementado «un plan nacional coordinado para enfrentar la pandemia en más de un año, en una conferencia de prensa virtual.

«Brasil tiene la capacidad y los recursos para enfrentar mejor esta pandemia y es inaceptable que no los utilice. Si actúan ahora, pueden salvar vidas», aseguró la directora general de MSF, Meinie Nicolai.

El miércoles el estado San Pablo, el más afectado por el coronavirus en Brasil, informó que está a pocos días del colapso de sedantes y otros fármacos necesarios para intubar sin dolor a los pacientes de terapia intensiva víctimas de Covid-19 y reclamó un urgente envío de remedios al Ministerio de Salud federal.

En este difícil contexto, la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz) lanzó su boletín epidemiológico que chocó de frente con la gestión del presidente Jair Bolsonaro: el laboratorio oficial recomendó coordinar las cuarentenas en los grandes centros urbanos para reducir el número «dramático» de muertes y contagios.

Brasil carece de una coordinación nacional de las cuarentenas debido a que son rechazadas por el presidente Bolsonaro, razón por la cual ya renunciaron dos de los cuatro ministros de Salud que han pasado por la cartera durante la pandemia y por la cual la responsabilidad y el costo político ha sido asumido por gobernadores e intendentes.

Pese a la negativa del Gobierno federal, el miércoles la Asociación Nacional de Hospitales Privados (Anahp) destacó que las medidas estrictas como cuarentenas y toques de queda están funcionando.

La cuarentena con toque de queda en al menos 17 estados durante marzo y parte de abril provocó una caída de 13 puntos porcentuales, del 98% a 85% en la ocupación de sanatorios y clínicas particulares, según la asociación.

«Teníamos un escenario de horror, con 150%, 160% de ocupación, con fila, llegando ahora 85%, 90%. Es una situación crítica pero que ahora parece buena», dijo Antonio Brito, director de la entidad.

San Pablo, que tiene una población de 46 millones, similar a la Argentina, superó los 85.000 muertos y redujo del 91% el 1 de abril al 85,5% la ocupación de las terapias intensivas con las cuarentenas rígidas sin comercios abiertos para transacciones presenciales, una medida en vigor desde el 12 de marzo hasta el próximo domingo.

Por estos números, el presidente Bolsonaro, quien será blanco de una investigación sobre las omisiones de su Gobierno durante la pandemia, recibió por parte de los científicos de Fiocruz, laboratorio que desarrolla la vacuna de AstraZeneca a nivel local, la recomendación para coordinar el confinamiento.

«Para controlar la propagación de la pandemia y preservar vidas, los investigadores refuerzan que es fundamental que los municipios brasileños, especialmente los que conforman las regiones metropolitanas, adopten medidas convergentes y sinérgicas, especialmente dentro de cada Región Metropolitana», sentenció el boletín de Fiocruz.

Y advirtió: «La flexibilización de las medidas restrictivas puede resultar en una aceleración en la tasa de transmisión y, por lo tanto, en casos severos de Covid-19 en las próximas semanas».

Brasil llegó el miércoles a los 361.884 muertos por coronavirus, con 3.459 decesos en las últimas 24 horas y 73.513 nuevos casos, lo que elevó el total de infectados a 13.673.507.

Solo en los últimos siete días, Brasil registró un promedio de 3.015 muertos diarios, una evolución que lo mantiene como el segundo país con más fallecidos por la pandemia, sólo detrás de Estados Unidos.

Para MSF, una de las principales razones por las que Brasil no ha logrado evitar esta «catástrofe humanitaria» y controlar mejor la segunda ola de la pandemia es porque el Gobierno federal de Bolsonaro se niega a «implementar una política clara y coordinada a nivel nacional».

Nicolai destacó que la aparición y transmisión de la nueva variante surgida en Manaos, conocida como P1, «no explica la dimensión de la crisis que se ve en Brasil».

«Lo comparamos con la situación con Sudáfrica, donde surgió otra nueva variante y se frenó un poco la segunda ola de otra manera. Por eso, le pedimos al Gobierno de Brasil que implemente medidas que ya demostraron ser efectivas en otros países», concluyó la directora general de MSF, organización que trabaja en el territorio brasileño desde 1991 y con amplia experiencia en epidemias en el mundo.

Las unidades de terapia intensiva reciben cada vez a más personas menores de 50 años con COVID-19. Los profesionales del sector temen un colapso ya que, además, los pacientes jóvenes tienen una internación más larga, de entre 15 y 20 días.

La segunda ola de coronavirus en la Argentina afecta sobre todo a las personas más jóvenes. La franja etaria que va desde los 25 a los 49 años es la que más elevó la curva de contagios, pero también es la que más hizo crecer la ocupación de camas de terapia intensiva.

Los pacientes críticos menores de 50 años pasan cuatro días más de internación que los adultos mayores, lo que hace que se vuelva más lenta la rotación, generando una amenaza para el sistema de salud, adicional al aumento de casos.

“Los pacientes jóvenes tienen una internación más larga, de entre 15 y 20 días. Y dificultan el movimiento de las camas. Resisten más y se quedan más tiempo, desde luego. Y la posibilidad de ingresar nuevos pacientes se acorta”, detalla la presidenta de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva, observa Rosa Reina, en diálogo con TN.

El médico clínico y miembro del comité de expertos que asesora a Alberto Fernández, Luis Cámera, agrega que “al haber una mayor cantidad de jóvenes infectados, inevitablemente termina impactando en las internaciones. La segunda ola avanza mucho más rápido y los más jóvenes van invadiendo el terreno”.

Para el infectólogo Eduardo López, quien también asesora al Gobierno nacional, «el 50% de los casos actuales son personas menores a 50 años, por lo que el impacto en la mortalidad debería ser menor. Pero el promedio que un individuo pasa en terapia intensiva sigue igual: no baja de los 14 días”.

Brasil se aproxima al colapso de su sistema público de salud, con más de la mitad de los estados del país al límite de su capacidad, mientras crece la presión para que el presidente Jair Bolsonaro tome medidas drásticas para contener la explosión de contagios.

El Ministerio de Salud reportó este martes un nuevo récord diario de fallecidos asociados a la covid-19, con 1.641 muertes en las últimas 24 horas.

El país vive su peor momento de la pandemia desde que el 26 de febrero de 2020 registrara el primer contagio, coincidiendo además con la irrupción de la variante amazónica (P.1), más transmisible, según estudios preliminares.

Desde noviembre, la curva de casos y fallecidos crece de forma preocupante, pero ha adquirido tintes dramáticos en los últimos 40 días, periodo durante el cual la media diaria de muertes no ha bajado del millar.

Brasil es, junto a Estados Unidos y la India, uno de los países más afectados por el coronavirus SARS-CoV-2, al contabilizar más de 257.000 decesos y 10,6 millones de casos, según datos oficiales.

UCI AL LÍMITE EN MÁS DE LA MITAD DEL PAÍS

Si en la primera ola la evolución de la pandemia en este país de dimensiones continentales y con 212 millones de habitantes era heterogénea, en esta segunda, más virulenta y letal, el SARS-CoV-2 ha puesto en jaque a más de la mitad del país al mismo tiempo.

El índice de ocupación de las unidades de cuidados intensivos del sistema público sanitario supera el 80 % en 19 de los 27 estados brasileños, con un matiz: son cada vez más los jóvenes con cuadros graves.

«El riesgo de colapso existe y ya lo estamos observando en varias regiones del país», afirmó a Efe el médico Carlos Starling, consultor científico de la Sociedad Brasileña de Infectología (SBI).

Después de meses de flexibilización, los Gobiernos regionales y municipales han endurecido las medidas de distanciamiento, como el cierre de negocios no esenciales y toques de queda nocturnos, a fin de evitar el colapso ocurrido en enero en Manaos, capital del estado de Amazonas.

MÁS CASOS, PERO MENOS CAMAS

Amazonas, donde surgió la nueva variante y cuya estructura hospitalaria ha sido históricamente precaria, vio desbordado su sistema sanitario en cuestión de semanas. Faltó hasta oxígeno.

Desde entonces, cientos de pacientes con covid-19 fueron trasladados a otros puntos del país para recibir tratamiento.

Ahora, otros estados van camino de ese escenario, como Santa Catarina y Minas Gerais, que ya han tenido que transferir a varios de sus pacientes a otras regiones de Brasil ante la falta de lugares en sus hospitales.

«La perspectiva no es buena. Lo que vimos en Manaos ciertamente lo vamos a ver en otras regiones de Brasil», advierte Starling.

La segunda ola llega además en un momento en el que se han reducido paulatinamente el número de camas de terapia intensiva financiadas por el Ministerio de Salud. También son pocos los hospitales de campaña que aún quedan en pie.

En diciembre había 12.003 camas UCI para la covid-19 financiadas por el Gobierno; en enero, 7.717, y en febrero, que acabó como el segundo mes con más muertes por la enfermedad en Brasil, 3.187, según datos del Consejo Nacional de Secretarios de Salud (Conass).

AUMENTA LA PRESIÓN SOBRE BOLSONARO

La entidad, que reúne a los 27 responsables regionales de las áreas de salud, exigió en la víspera la adopción de «medidas inmediatas» a nivel nacional para hacer frente «al peor momento de la crisis sanitaria», entre ellas un toque de queda nocturno, el cierre de bares y playas, y la suspensión de actividades presenciales educativas y deportivas.

El presidente Bolsonaro, que se niega a reconocer la gravedad de la pandemia y acostumbra a criticar cualquier tipo de restricción, aún no se ha hecho eco públicamente de ese llamado, pero sí lo ha hecho el vicepresidente, Hamilton Mourao.

Mourao afirmó este martes que «no sirve» imponer «algo nacional» en un país tan grande como Brasil porque sería imposible hacerlo cumplir y el Gobierno, según dijo, no es una «dictadura».

Asimismo, declaró que la población está «cansada» de restricciones y apostó por acelerar la campaña de vacunación.

Sin embargo, la inmunización, que empezó a mediados de enero, avanza lentamente y hasta la fecha solo ha recibido la primera dosis un 3,2 % de la población.

LA P.1 PUEDE ESQUIVAR LOS ANTICUERPOS DE LA CORONAVAC

Especialistas consultados por Efe creen que detrás de esta explosión de casos y muertes puede estar la nueva variante P.1, presente en al menos 17 de los 27 estados del país.

En la última semana se han publicado tres estudios preliminares que advierten de la peligrosidad de este nuevo linaje, que parece ser más transmisible, infecta con una carga viral hasta diez veces mayor, y es capaz de sortear los anticuerpos generados por una persona previamente contagiada.

Además, científicos de la Universidad de Sao Paulo (USP) y la Universidad de Campinas (Unicamp) sugirieron que la P.1 puede escapar de los anticuerpos que genera una vacuna desarrollada a partir del virus inactivado, como la del laboratorio chino Sinovac, conocida como Coronavac, la más utilizada en Brasil.

«Eso significa que cinco meses después de la vacunación, la persona podría infectarse de nuevo, pero no necesariamente desarrollará la enfermedad, pues los anticuerpos producidos no son el único factor de protección de la vacuna», indicó a Efe José Luiz Proença Modena, profesor de virología de Unicamp y coordinador de la investigación, apoyada por la Fundación de Amparo a la Pesquisa de Sao Paulo (Fapesp).

Los resultados fueron obtenidos a partir de una pequeña muestra de ocho pacientes que recibieron las dos dosis del inmunizante chino durante los ensayos clínicos de la fórmula y aún necesitan ser contrastados por otros miembros de la comunidad científica.

Carlos Meneses

Brasil, uno de los países más castigados por la pandemia del COVID-19 en el mundo, registró en las últimas 24 horas 1.232 nuevas muertes por la enfermedad, con lo que encadenó tres días seguidos con más de 1.200 óbitos diarios, según los datos divulgados este jueves por el Gobierno.

De acuerdo con el último boletín del Ministerio de Salud, con 1.232 muertes y 56.873 nuevos contagios en las últimas 24 horas, Brasil roza los 229.000 fallecimientos y los 9,4 millones de casos desde el inicio de la pandemia.

De acuerdo con el boletín, el gigante latinoamericano acumula 9.396.293 contagios desde que registró el primer caso de la enfermedad el 26 de febrero de 2020 y 228.895 muertes desde que contabilizó la primera víctima el 12 de marzo del año pasado.

Los datos confirman a Brasil como uno de los epicentros globales de la pandemia y como el segundo país con más muertes por COVID en el mundo después de Estados Unidos y el tercero con más casos después de la nación norteamericana e India.

FOTO DE ARCHIVO. Familiares de pacientes hospitalizados o que reciben atención médica en casa, en su mayoría afectados por COVID-19, cargan cilindros mientras compran oxígeno a una empresa privada en Manaos, Brasil. 15 de enero de 2021. REUTERS/Bruno Kelly

El país, que enfrenta una segunda ola de la pandemia sin haber superado la primera y desde el 25 de enero registra un promedio diario de más de 1.000 muertes por día, acumuló tres días seguidos con el número de víctimas por encima de las 1.200: 1.210 el martes, 1.254 el miércoles y 1.232 el jueves.

El promedio de muertes en los últimos 14 días se ubicó este jueves en 1.050 diarias, con un crecimiento del 7,80 % frente a la media de hace dos semanas (974 óbitos diarios el 21 de enero) y un salto del 58,61 % en comparación con la de hace un mes (662 óbitos diarios el 4 de enero).

El país también encadenó tres días con más de 54.000 contagios diarios, con lo que el promedio de casos se ubicó este jueves en 49.920 diarios, lo que equivale a un aumento del 42,59 % con respecto a la media de hace un mes (35.010 contagios diarios el 4 de enero).

De acuerdo con el Ministerio, 8,3 millones de personas que contrajeron la enfermedad ya se recuperaron, lo que equivale al 88,2 % de los contagiados, y 875.735 continúan bajo observación médica, que representan el 9,3 %.

Estos datos indican que la tasa de mortalidad de la enfermedad en Brasil es del 2,5 % de los contagiados y que el índice de óbitos es de 109 por cada 100.000 habitantes y el de casos de 4.471 por cada 100.000 habitantes.

El traslado de una paciente (Michael DANTAS / AFP)

Colapso sanitario en Amazonas

El Ministerio de Salud informó que ya ha trasladado fuera del estado de Amazonas a 506 pacientes con coronavirus debido al colapso del sistema hospitalario.

Los pacientes han sido trasladados por la Fuerza Aérea Brasileña a otros estados con menor carga sanitaria que Amazonas, donde además de la falta de camas, se carece de oxígeno.

En concreto, este jueves 34 enfermos han partido para Belém, capital del estado de Pará, y Río de Janeiro, y el objetivo del Gobierno es acelerar la evacuación hasta llegar a los 1.500 pacientes, lo que permitiría tener espacio en los centros hospitalarios. Para ello, están negociando con una empresa aérea privada que podría trasladar hasta 80 pacientes en cada trayecto.

El país ya vacunó a 3 millones de personas

Pese al agravamiento de la pandemia en las últimas semanas, Brasil ya vacunó contra el COVID-19 a cerca de 3 millones de personas, el 1,4 % de la población, principalmente profesionales de la salud responsables del combate al virus, ancianos e indígenas.

Según el Ministerio de Salud, Brasil ya vacunó al 37 % de los 410.000 indígenas adultos que viven en aldeas, principalmente en la Amazonía, considerados prioritarios en la campaña de inmunización por ser uno de los grupos más vulnerables a la pandemia.

La campaña de vacunación se ha realizado hasta ahora con 10 millones de dosis de la vacuna de la farmacéutica china Sinovac y con 2 millones del antídoto desarrollado conjuntamente por el laboratorio AstraZeneca y la Universidad de Oxford.

Brasil recibió el miércoles el principio activo para producir en el país otras 8,6 millones de vacunas de Sinovac y espera para el sábado la materia prima necesaria para fabricar 10,6 millones de dosis del antídoto de AstraZeneca.

Desde el Hospital de Trelew esperan que a partir de la segunda semana de enero vuelva a crecer la curva de contagios en la ciudad.

En diálogo con el programa El Mirador, en Cadena Tiempo, el director asociado del Hospital “Adolfo Margara”, el doctor Matías Castiñeira adelantó que “tendremos un aumento de casos entre el 10 y el 15 de enero, por la reuniones en las fiestas de fin de año”.

El profesional advirtió que la ocupación de camas de Terapia Intensiva del nosocomio llegó al máximo e incluso temen por el pico de contagios en las localidades del interior de la provincia que dependen del Hospital de Trelew. “Particularmente en la ciudad tenemos un aumento de casos y en localidades como Dolavon, Las Plumas y Camarones, que son lugares que venían prácticamente sin contagios, hoy se ven casos graves”.

Detalló que en el caso de Trelew “hace dos meses había 1.900 pacientes con Covid en nivel domiciliario”, incluso hace 15 días el Hospital llegó a contabilizar 500 personas que trascurrían la enfermedad en sus casas, “pero hoy estamos en una curva ascendente de 750 personas”, concluyó.

Una pasarela peatonal en el municipio Libertador en Caracas, Venezuela, colapsó este lunes, y dejó al menos una persona sin vida y a otras 3 heridas, según la alcaldesa Erika Farías.

A los lesionados se les trasladó al Hospital Miguel Perez Carreño del oeste de Caracas para recibir atención, informó Farías. Al parecer todos los heridos eran transeúntes, de acuerdo a la funcionaria.

Imágenes captadas por medios locales muestran la pasarela afectada sin partes de su piso. También escombros en la principal autopista de la capital venezolana.

Farías explicó que se está investigando qué ocasionó el colapso. «Todas las instituciones que tenemos que ver con la movilidad, la infraestructura, el mantenimiento de las obras y servicios de la ciudad de Caracas nos hicimos presentes inmediatamente. Se está haciendo el informe que va a determinar las causas de este hecho tan extraño», indicó Farías.