Iris Córdoba nació en Buenos Aires, se graduó como abogada, realizó un master en Administración y Políticas Públicas en el INAP-Universidad de Alcalá y también un master en Economía Digital de la Escuela de Organización Industrial. Obtuvo la suficiencia investigadora del Doctorado en Economía Aplicada en la mencionada Universidad. Desarrolló su carrera profesional vinculada al fomento del emprendimiento y apoyo a las pequeñas y medianas empresas, desde la perspectiva público-privada, tanto en Latinoamérica como en España, haciendo énfasis en industrias culturales, economía del español, e industria del deporte y el entretenimiento.
Desde 2015, puso en marcha y se desempeña como directora general del Global Sports Innovation Center (GSIC) powered by Microsoft, una iniciativa colaborativa entre los sectores públicos, privados y académicos, que busca promover la innovación en la industria del deporte, creando un ecosistema -actualmente, compuesto por más de 200 empresas e instituciones- que de manera coordinada genera sinergias y proyectos de valor en el sector.
Asimismo, puso en funcionamiento y dirigió durante 6 años la Plataforma del Español, una asociación empresarial innovadora sin fines de lucro, que busca posicionar al idioma español como recurso económico y el emprendimiento del sector de las industrias culturales. Participa activamente como ponente, mentora y jurado en competencias de startups y en eventos relacionados con el deporte y la tecnología, como Sports Analytics World Series, The SPOT, TEKAN TEN by Asics, WFStartcup by GSIC, entre otros.
En 2016, fue reconocida como una de las 10 mujeres más influyentes de la industria del deporte, según el ranking que publica anualmente la revista Metadeporte. En 2017, fue candidata a formar parte de las Top 100 Mujeres Líderes de España de la asociación Mujeres y Cía. Al año siguiente, ingresó a ese ranking en la categoría Revelación y Emprendedores.
Es miembro activo en diversos foros, como el de mujer del CSD, Comité de Deportes de la Asociación Española de Marketing, Fútbol en Palabras de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes y Engagement de Mujeres y Cía. Es miembro del Consejo Asesor de World Football Summit y en 2018, la revista Metadeporte la nombró una de las 20 mujeres más influyentes en la industria del deporte en España. En enero de 2021, recibió el reconocimiento “Exceptional Women of Excellence” de parte de la organización del Economic Women Forum.
Entrevistada por Infobae, Iris Córdoba contó cómo logró posicionarse en la industria del deporte y liderar los desarrollos tecnológicos más trascendentes a través del GSIC promovido por Microsoft, que hoy cuenta con más de 200 socios, en 36 países, entre los que se destacan La Liga, el Real Madrid, Porsche y Sport Singapour, entre muchos otros.
“Siempre tuve vocación por ayudar al sector empresarial y por entender cómo funciona el mundo del emprendimiento. Trabajé en la Administración Pública y me especialicé en Políticas Públicas, pasando por la Secretaría PYME en 1995 hasta que fui ganando una serie de becas y en 2003 llegué a Madrid, España. Vengo de una familia en la que mi padre era ingeniero, quien tuvo mucho éxito en la parte privada y siempre vivió muy de cerca lo difícil que es ser emprendedor, y mi madre era enfermera”, contó Iris Córdoba.
“En España, empecé a trabajar y a volcarme en disminuir la brecha entre grandes y pequeñas empresas. Primero, en los “clústers” a nivel europeo, y luego, en cómo generar un espacio de encuentro entre la administración pública, la universidad, los centros de innovación y las empresas para producir sinergias y potenciar un sector económico concreto. Hace varios años di un vuelco hacia el deporte, previo a hacer otro posgrado en Economía Digital. Ahí cambié el foco: no tanto Políticas Públicas sino Economía Digital y Negocio Digital”, indicó.
-¿Cómo llevó su carrera a la industria del deporte?
-Empecé hace 7 años y lo hice para romper un poco las reglas que había en un centro de innovación. Fue Microsoft quien tuvo esa visión y me dio la oportunidad en el área del deporte. La empresa estaba creando su área de negocios del deporte a nivel mundial y uno de los primeros clientes que tuvo en Europa fue el Real Madrid. En ese momento, junto con el partnership de Microsoft y el Real Madrid, se creó el primer centro de innovación a nivel mundial de deportes de Microsoft: el Global Sport Innovation Center (GSIC) powered by Microsoft, que tengo la suerte de dirigir desde su creación, ocurrida en 2015. Buscamos crear un espacio de encuentro con esa filosofía de ayudar a los pequeños, para que puedan convertirse en proveedores de los más grandes. Se trata de un “cluster” empresarial, una asociación sin ánimo de lucro donde promovemos y facilitamos el acceso de la tecnología de Microsoft para emprendedores, grandes entidades deportivas -como el Real Madrid, el Manchester City o la Liga Española, que son socios- y un gran número de empresas -actualmente más de 280 en 40 países- a quienes ayudamos a alcanzar la transformación digital del sector. Es decir, dentro de la transformación digital, esto significa poder monetizar y detectar activos digitales que les permita a estos clubes llegar al próximo nivel, para tener una mayor conexión con sus aficionados o conseguir espacios más inteligentes -entre otras cosas- ya que muchos de esos desarrollos son llevados a cabo por empresas muy pequeñas, con la dificultad real que tienen para convertirse en proveedores de una gran entidad deportiva y de un gran Club. Por eso, la apuesta es trabajar con partners y ayudar a estas empresas más pequeñas, con el fin de que logren validar y prescribir su producto.
-La transformación digital en la industria del deporte, ¿apunta a trabajar de manera coordinada entre grandes y pequeñas empresas?
-Para mí esa es la tendencia, porque trabajar con empresas pequeñas permite acelerar el proceso de incorporación de la tecnología. El desafío que tenemos es integrar esas soluciones dentro de las entidades porque, finalmente, puedes comprar o adquirir mucha tecnología pero, si no la integras a la estrategia de la entidad, es difícil que sea sostenible. Lo que hacemos es apoyar todo ese proceso y, al final del día, ser sostenibles, monetizar, apoyar al deporte y devolver a los aficionados lo que ellos le dan. En plena pandemia, hemos visto cómo el deporte se convertía en un termómetro de lo que estaba pasando. Cuando estuvimos confinados -independientemente del país que fuera- veíamos que también se confinaban nuestros jugadores favoritos y eso nos daba la pauta de que algo serio estaba pasando. Decíamos “Algo está mal, porque no puedo ver el Clásico River-Boca, o al Real Madrid, o al Barcelona. Pero cuando retornamos, el hecho de no poder volver a los estadios nos ha demostrado cómo la innovación y la tecnología nos ha permitido seguir conectando y viendo cómo entrenaban los jugadores en sus casas, cómo vuelven con protocolos de seguridad, etc. Como dijo Satya Nadella, CEO de Microsoft, en los dos primeros meses de la pandemia hemos podido ver la transformación digital que se esperaba en dos años. La pandemia aceleró la transformación digital en todas las industrias y el deporte no ha sido ajeno. En este último año, todos pudimos ver la innovación y la transformación digital en el deporte.
-¿Qué se tiene en cuenta a la hora de innovar en la industria del deporte?
-Es trascendental saber qué tecnologías son las que están marcando tendencia para el futuro, como soluciones de inteligencia artificial o de realidad virtual, que nos permiten poder seguir entrenando -incluso, en una situación de confinamiento- poder seguir generando ”engagement”, por ejemplo. Es decir, todo lo que nos permita ampliar un estadio y que su capacidad sea infinita, o poder comprar un ticket de realidad virtual, que posibilite la experiencia de estar sentado en el sillón de casa, pero viendo un partido como si estuviéramos sentados en una misma grada, ya sea en Argentina o en España. Todas las soluciones de inteligencia artificial, de realidad aumentada, de realidad mixta, etc., son tendencia. Sobre todo lo que ayuda a monetizar, a generar “engagement” con los aficionados y la prevención de lesiones, que permite alargar la vida útil de un jugador y mejorar su rendimiento deportivo. Finalmente, implica todo lo que sea hacer más “smart” o inteligente el espacio de juego, ya sea un estadio, una maratón o una cancha de tenis.
-En un mercado donde predominan los hombres, ¿cómo logró abrirse paso y liderar el sector?
-Crecí en un entorno donde nunca hubo diferencias entre sexos. Pude ver la evolución que hubo en los últimos años en Europa, con relación a la mayor presencia de la mujer. También, esto es posible gracias a los medios de comunicación comprometidos que han creado rankings para posicionar a la mujer. De hecho, estoy en varios de ellos integrando el top 10: ahora está el top 20 y vamos por el top 50. Eso es algo muy positivo. Como mujer, es bueno ser ejemplo de otras mujeres y necesitamos compartir más casos de éxito en carreras de tecnología y de ciencia. Tenemos que compartir que la pasión y la vocación -ya sea por el deporte o la tecnología- no tienen que ver con el sexo, sino con hacer lo que uno quiere y conseguirlo. Por eso, las mujeres que hoy tenemos una posición directiva, debemos asumir ese compromiso y ser ejemplo. En ese sentido, por el Día de la Mujer, lanzamos un Manifiesto donde contamos el compromiso que asumimos en apoyarlas, ya que en todos los eventos que realizamos hay representaciones femeninas. Además, es clave darnos visibilidad entre nosotras, porque somos muchas las mujeres que trabajamos en el sector y ocupamos cargos directivos. En esta industria, hay muchas más mujeres de lo que creemos y, en estos últimos años, todo ha ido cambiando. Vemos que el fútbol femenino tiene mucha más visibilidad y aceptación. Creo que vamos por el buen camino.
-¿Qué recomendaciones les da a los profesionales de la industria del deporte que buscan alcanzar una posición de liderazgo como la suya?
-Un consejo fundamental es el poder del networking: hay que saber estar en el momento indicado y en el lugar adecuado. Para un emprendedor, es clave estar en espacios de networking para darse a conocer y, además, necesita que le den credibilidad. Cuando alguien tiene un proyecto o una idea, lo que necesita no es solo un inversor: hay muchos más fondos de inversión buscando buenas ideas, que empresas en las cuales invertir. Es más importante poder vender, que levantar dinero a nivel de inversión. Para eso, el networking es clave y es necesario estar presente en espacios donde se comparte, como en los grandes eventos o en aquellos sitios donde -además- se comparten conocimientos.